La ultracavitación es conocida también como lipoescultura sin cirugía. Es un método no invasivo altamente efectivo e indoloro que permite la modelación corporal. Se basa en la generación de microburbujas de vacío en el interior del tejido graso; estas implosionan y luego estallan de manera precisa y sin dañar la microcirculación, haciendo que el adipocito libere su contenido, para ser luego utilizado como fuente de energía por diversos tejidos corporales.
Asegura tratamientos cortos, con resultados duraderos y visibles desde las primeras sesiones; además, al no existir inflamación ni alteración de los tejidos circundantes, no se necesita tiempo de reposo tras el tratamiento.
Se recomienda antes y después del tratamiento beber mucha agua.
En personas con colesterol y trigliceridos por sobre el nivel normal, no es el tratamiento indicado. También se evita en personas con marcapasos,
enfermedades hepáticas, pacientes oncológicas y en mujeres embarazadas. Dado que el equipo trabaja en kHZ de alta frecuencia, en ocasiones debido al
tipo de adiposidad a trabajar, puede sentirse un leve zumbido, pero es normal y desaparece al finalizar la sesión.
No, la paciente retoma sus actividades habituales de manera inmediata.
Recomendamos comenzar con 4 sesiones mensuales a realizarse una vez por semana para notar los primeros resultados. El cuerpo se toma su tiempo en eliminar la grasa que se licua con la ultracavitación, por lo que recomendamos la ingesta de agua antes y después de cada sesión para que el proceso de eliminación se realice en forma adecuada y más rápidamente.
